Ayer, yo, dos compañeros míos, nuestro profesor de español y mi mamá (fue ella la que nos llevó al orfanato en su automóvil) nos fuimos primero a Carrefour a comprar (del dinero recogido de la venta de las revistas) alimentos para los ñiños del orfanato "Sfantul Nicolae".
Tras comprar naranjas, plátanos, bombones, leche etc, nos dirigimos hacia el orfanto, donde la directora y los infantes nos esperaban. Al vernos se pusieron muy contentos, especialmente los pequeños, aunque también sus madres. Su alegría era sincera y sentí que conseguimos mejorar, aunque sólo por esta Navidad, sus vidas.