La semana pasada tuvimos la oportunidad de ir a comer en un restaurante con comida tradicional española. Cuando entramos en el restaurante nos sorprendió el aspecto del lugar que era muy rústico. A Hristu le gustaron las camisetas del Real Madrid en las paredes. A Miguel no le gustó el bocadillo con jamón porque tenía tomates, pero a Alin le gustaron mucho aquellos bocadillos y la salsa con ajo. En cambio, a Miguel le encantó la paella y la leche frita. A Julia le encantaron las frutas porque eran frescas y se combinaban perfectamente con la leche frita. A Adrian le gustó tanto la salsa que la mezcló con todos los platos. A María le gustó la tortilla porque la combinación de patatas y cebolla estaba muy buena. Finalmente, a todos nos gustó mucho la paella, fue divina.