Un día yo fui a la peluquería de mi amiga. Allí yo me senté en la silla y vi una cebra que se cortaba las rayas. Después vi un leon que se cortaba la melena. Yo pregunté a mi amiga: -Querida,pero ¿la peluquería no es para personas? -Si,pero es también para animales. -!Ay! Después de una hora vi un mono. El tenía mucho, mucho, mucho pelo y debía usar unas tijeras mucho más grandes para cortar su pelo. El mono cogio el pelo del león y se lo pegó a su cuerpo. !ENTONCES YO DESCUBRI EL LEMONO!
Me gusta mucho como escribes, Cami. Este cuento es genial. Tendré que aprender rumano para leerte en tu lengua.