¡España, haga algo, por favor! Si no se pone remedio a esa vergüenza, en una década se va a perder lo que se ha ganado durante siglos de serio esfuerzo lingüístico.
Creo que la prensa española actual atraviesa uno de sus peores momentos; me refiero a la calidad de sus contenidos, sobre todo a la corrección de los textos. Periódicos prestigiosos de larga trayectoria lanzan al aire artículos con errores de un descuido digital espantoso que afean mucho el relato periodístico, denotan superficialidad y falta absoluta de respeto hacia el lector, el periodismo y la lengua en general.
Ultimamente he leído multitud de artículos con faltas que se deben, como decía, principalmente al hecho de que lo publicado no se repasa una y otra vez por nadie. Lo escrito a prisa se vomita prácticamente a la red como un desecho a un enorme canal de desperdicios en que se ha visto transformado todo lo público. Y por esos contenidos, por esa vergonzosa chapuza, esos periódicos pretenden que paguemos abonos, que nos suscribamos o comentemos.
En un artículo de La Vanguardia, por poner un ajemplo, podemos leer "con una gran deivisión" (por división), "al pueblo de venezuela" (Venezuela con "v" minúscula, fragmento subrayado, además, como cita), "mostró las supuests imágenes" (lo de supuests debe ser en catalán).
Hace algún tiempo leí un artículo de Javier Marías en El País que contenía una errata que nadie se cuidó de enmendar.
Y los ejemplos podrían continuar; son tantos que llenarían páginas y págnas. Muchos lectores ya se han hartado de llamarles la atención, se han resignado porque es inútil.
Somos muchos los profesores, extranjeros y nativos, que damos clases de español en el mundo entero, esforzándonos por enseñar a miles de alumnos de todas las nacionalidades un castellano correcto y aficaz, corrigiendo rigurosamente y a conciencia las faltas que cometen. Logramos de esta manera, con mucha decencia y humildad, inculcarles respeto y hasta amor por una lengua que en su patria no parece que se tenga en mucha estima.
Si no se pone remedio a esa vergüenza, en una década se va a perder lo que se ha ganado durante siglos de serio esfuerzo lingüístico. Por lo que respecta a mí, para lecturas periodísticas extra, prefiero recomendar a mis alumnos el periódico Clarín de Argentina.
¡España, haga algo, por favor!
Recomendamos: DRAE, Gran Diccionario de Uso del Español Actual, Diccionario de Dudas y Dificultades de la Lengua Española y otros.