La cebolla (Allium cepa) es un bulbo muy sano.
El bulbo de la cebolla tiene en su composición un tallo a modo de disco y de este tallo salen las hojas. Las hojas tienen dos partes: la parte basal y la parte terminal. La parte basal está formada por vainas engrosadas y la parte terminal es la parte verde y fotosintéticamente activa de la planta.
El fruto es de tipo cápsula y contiene semillas pequeñas (1 g = 250 semillas), de color negro.
La cebolla en flor puede verse al cabo de pocos meses de sembrar bulbos de cebolla.
La cebolla nos ha llegado de Asia Central. Ya la consumian los griegos y los romanos.
Es la hortaliza más conocida y más consumida.
El principal componente de la cebolla es el agua, que supone el 90 % de su composición. En el 10% restante encontramos todos los nutrientes y todas las propiedades beneficiosas. Posee una fuerte acción contra el reumatismo, disuelve el ácido úrico, lucha contra las infecciones.
Da a la comida un sabor especial. Sofrita en el aceite, deja su aroma que constituye la base para muchos platos.